PERPETUACIÓN O RENACIMIENTO

Estamos en un momento extraño, donde la libertad individual se ve sometida a otros intereses que poco o nada tienen que ver con ella.

Sacrificio por un bien mayor o futuro, buscar dinero para comer o pagar la casa... se han convertido en las únicas metas posibles del día a día. Como consecuencia, la vida normalmente se convierte en frustración, agotamiento y desprecio. La pregunta es evidente: ¿no lo sabemos hacer mejor? La respuesta también: parece ser que no.

Y es que en este nuevo sistema en el que se pide mucho y se ofrece poco, acaba con las esperanzas y los sueños de cualquiera. Una sensación de desagradable escasez es el nuevo monarca. Pero todavía nos queda algo.

Dependemos, parece ser, de que nos dejen hacer esto o lo otro. Estamos tan pendientes del verdugo que nos han vendido que no nos damos cuenta de que nos roban la cartera por la espalda, y cuando nos enteramos, le echamos la culpa al de al lado. Aplaudimos efusivamente a los dirigentes, o si no, los abucheamos, en vez de tomar la determinación de pasar de ellos y hacer las cosa bien. Nos quitan un porcentaje enorme de cada compraventa, de cada vivienda, de cada pequeño negocio, y se lo reparten entre ellos como si la caja común fuera suya. El agua y la luz suben como la espuma, pero si te independizas en ese sentido te machacan de mil formas disponibles y si no se inventan una nueva. Hacen leyes cada vez más absurdas y el propio derecho te priva de tus derechos más inalienables. La comida que te venden cada vez es más asquerosa y cara, primando los productos adulterados e insalubres de una sola compañía y sus mil filiales. Te dicen y te repiten que si hay otra manera de hacer las cosas, ya se les ocurrirá a tus dirigentes. Señoras y señores, quien nos ha metido en todo este embrollo es quien tiene la llave de tu futuro bienestar.

Explicado esto, yo digo: ¡Y una mierda! Quien nos ha sometido lo ha hecho por dinero y por poder, y no van a volver atrás. Nos contará mil cuentos, nos prometerán soluciones que nada arreglan. No se va a ir. No va a dejar de fastidiar, ni de pensar en su propio bolsillo. Que les den. Amigos, no os enfadéis conmigo por deciros esto, pero la única solución la puedes poner en práctica tú mismo. Vive al margen de la política, del fútbol de masas, de los engañosos medios de comunicación y de sus controles arbitrarios. Piensa qué sabes hacer y organízate con personas con las que colaborar. Gánate el pan con tu inteligencia y haz algo más que sobrevivir, pasar la vida entre entrevistas de trabajo (estafas laborales) y lamentarte de tu mala suerte. Boicotea el sistema de forma no violenta pero con acciones efectivas, es él lo que te está ahogando, no los inmigrantes, su prima de riesgo, ni las cartucheras de una famosa de postín. Y va a hacer lo mismo con tus hijos y con tus nietos, igual que lo hizo con tus padres y con tus abuelos. Despierta, estas en un mundo dominado. Y la llave la tienes tú y tus redes sociales, y no me refiero a Internet. Despierta, no pagues si puedes evitarlo sus tasas e impuestos, a no ser que sean para algo útil, no para sus banqueros ni para los sucios magnates de empresas públicas privatizadas (regaladas).

Crea estructuras solidas sostenibles y solidarias, no empresas que quieran comerse el mundo. Vive tu vida como quieras, en democracia, en asamblea anarquista, en comunidad, pero cuenta con la gente que te rodea y sobre todo actúa, lucha contra el fuerte que quiere dominarte. No tienes por qué soportar todo esto.

Si vives en el campo y tú y otros que quieren cambiar las cosas tenéis tierra, comparte y únete, no dudéis y embarcaos en un nuevo proyecto lejos de Monsanto. Si tienes un local comercial que no se alquila ni a la de tres, busca gente que tenga una idea justa y comenzad a construir. Si sabes hacer pan, si tienes animales, si haces unas figurillas muy chulas, si eres albañil, mozo de almacén, comercial... Controla tu vida, empieza ya. Construye una idea democrática, donde cada integrante se sienta valorado, donde cada idea es tenida en cuenta porque seguro se puede llevar a la practica. Todos somos importantes, a pesar de lo que nos han vendido. Distribuye los beneficios equitativamente, ni el que tiene más rango ni más estudios tiene por quéque cobrar más. De hecho, intenta eliminar de tu cabeza las estructuras piramidales, los privilegios y las decisiones unilaterales. Carajo, son esas ideas anquilosadas y viejunas las que nos han traído hasta aquí, despreciarlas es casi obligado, pues parece que solo hacen daño.

Móntatelo como quieras, pero haz algo ya, caray. Algún día pensaremos que cómo pudimos estar tan ciegos ante el resplandeciente poder del dinero y de sus creadores, pero mientras tanto, toca ir abriendo los ojos poco a poco. Desconfía de los dirigentes y de sus torpes pero repetitivas mentiras, ellos ya recelan de ti. Anima a otros a construir este espacio contigo.

Vive al margen de su ley, respetando el sentido de la ética y de la justicia. Comparte tus conocimientos, tus logros y tus fracasos. Si eres creyente, ya es hora de comunicarte con tu dios de manera directa, no a través de estructuras piramidales de poder. Sabes que se puede hacer. Edifica el edificio de tu propia libertad, niega la legitimidad del que te intenta someter, sea quien sea.

Te necesitamos completamente libre, con nos me refiero al resto de tu raza, a excepción de unos pocos, que te necesitan amaestrado y obediente. No le debes lealtad a nadie, es algo que depende exclusivamente de ti, que no te hagan creer lo contrario.

Por favor amigo, seas quien seas, rompe tus cadenas y mira a tu alrededor. No necesitamos ponernos de acuerdo. Tan sólo trabajar juntos.